Esta obra musical instrumental pertenece al compositor chileno Juan Antonio Sánchez, quién además es el interprete en la versión de audio adjunta. Juan Antonio Sánchez es uno de los compositores nacionales más destacados por su desarrollo musical, específicamente en composición, de la guitarra, desarrollo fundamentado principalmente en la fusión característica muy original de ritmos latinoamericanos además de un rescate progresivo de la música tradicional chilena. En general sus obras combinan géneros musicales como chacareras, tonadas zambas y tangos con rasgos típicos del jazz, principalmente reflejados en la armonía de sus obras. Se reflejan también influencias claras de compositores latinoamericanos declaradas por el propio autor como Egberto Gismonti, Violeta Parra, Alfredo Zitarrosa, etc., influencias que se imbrican de forma muy acertada y que dan por resultado un estilo nacionalista original y característico.
A modo de argumento biográfico Juan Antonio Sánchez Dittborn nace en 1965. Entre 1974 y 1981 vive en Argentina, México y Mozambique, en donde integra diversos grupos de raíz latinoamericana tocando guitarra, quena y flauta traversa. Entre 1984 y 1989 estudia licenciatura en música en la Universidad de Chile, guitarra con Oscar Losen.
En particular, todavía podemos clasificar, forma parte del disco Local 47, producido en el año 2000 y que marca el inicio de la etapa solista del compositor. La obra está originalmente escrita para guitarra clásica y la versión del disco es un arreglo para guitarra, cellos, y cajón peruano, timbres que forman parte del típico quinteto con el que el compositor desarrolla sus presentaciones en vivo como el registro de sus obras. Puntualmente en esta grabación participan los interpretes J. A. Sánchez en guitarra, Cristian Gutierrez en cello, Claudio Morales en viola y Claudio Araya en cajón peruano, la instrumentación y arreglos de la obra pertenecen al mismo autor.
Como perspectiva de apreciación musical, la obra se estructura sobre la tonalidad de Am con ritmo de compás generalizado de 12/8 y en menor medidas la derivación de 6/8. Se emplea el uso de variados recursos musicales como la presentación del tema en pizzicato, tema que se presenta cuatro veces y que se varía con dos voces, cambio de tonalidad y con un desarrollo final ligado a una especie de coda.
La armonía se encuentra ejecutada fundamentalmente por las cuerdas cellos y violas utilizando acordes con 7M y m, además de disonancias que en el desarrollo armónico se presentan como progresiones modulantes. El punto más destacable en términos de modulación y estructura general se presenta en el compás nº 27 en donde una progresión melódica desarrolla el tema hacia la tonalidad de Bm para luego en la reexposición volver al tema con su tonalidad original de Am junto a la coda implícita. Todo este desarrollo de progresiones para modular es acompañado con una estructura dinámica muy acentuada entre mp y f , característica desarrollada fundamentalmente por las cuerdas frotadas que presentan un mayor rango dinámico en su intensidad i registro musical.
Como otro recurso musical se puede destacar el ritmo sincopado en la distribución del tema principal y la utilización de ritmos aditivos sobre la coda, como los cuatrillos sobre la unidad de compás blanca con punto del compás 54, que también es acompañado de reguladores dinámicos como se desarrolla en casi la totalidad de la obra.
Mención a parte merece la introducción ejecutada por el cello que emula el relato de un partido de futbol que hasta podría decir que es en portugués por su rapidez y ligaduras entre silabas, muestra en esencia la posibilidad melódica del cello en comparación con la voz humana.
El objetivo de exponer esta obra presenta más de una visión; Primero, representa toda la afición por la guitarra que el compositor desarrolla entre lo clásico y lo popular latinoamericano que además posee otras mezclas las que pueden evocar la música del conjunto holandés “FLAIRCK”, fusión guitarristica que a modo personal es uno de los recursos que puede permitir el mayor desarrollo progresivo sobre la base de un estilo musical particular, ayudando al desarrollo musical del autor y de toda una corriente representada en su obra.
En términos emotivos la obra se me presenta a raíz de la apreciación generalizada por la música latinoamericana y en especial de la fusión y el jazz, en particular, en relación al compositor, hace años conseguí un disco del grupo entrama, en donde este se desempeñaba como flautista y guitarrista, como ventan de su obra solista, se presenta esta obra expuesta en donde por sobre todo se resalta la introducción en cello que a primera vista (u oído) no se puede descifrar del todo pero si se desarrolla finalmente la idea del relato. Esta parte de la obra presenta un carácter impresionista que de alguna forma representa en conjunto con el resto de la obra las decepciones futbolísticas de nuestro país, la parte central con acordes mayores, muestra la resignación por estos magros resultados y la esperanza de la clasificación con calculadora en mano que ya se ha transformado en una visión típica y “morrocotuda” en el sector pichanguero nacional y que resume la obra como el antitriunfo absoluta del deporte de la pelota en la red.
Juan Rosales Cayuqueo
el link para la super obra es:
....y estos son los links para las partituras del temita, es la versión originalisosma para guitarra: